Se presentaron pocos jurados convocados para el debate y luego de las recusaciones de las partes no se alcanzó el número necesario. El Tribunal Oral Nº 4 tendrá que dar una nueva fecha.
Suspendieron el inicio del juicio por el femicidio de Melissa Kumber (27), que tiene como único acusado a Mauricio Nicolás Sánchez (33), su expareja y quien es investigado por haberle disparado en la cabeza delante su bebé de siete meses en junio de 2019.
El motivo de la cancelación fue que se presentaron pocos jurados (es un juicio por jurados) para el debate y luego de las recusaciones de las partes no se alcanzó el número necesario. El Tribunal Oral Nº 4 tendrá que dar una nueva fecha, aunque todavía no se sabe cuándo podría ser, según le confirmó a TN la madre de la víctima, Claudia Vallejos.
Antes de ser asesinada, la mujer lo había denunciado en cuatro oportunidades. “Ella me tiró y yo le tiré, y le pegué en la cabeza. Yo también estoy herido”, fueron las palabras que Sánchez les dijo a los oficiales que fueron hasta el lugar del crimen tras un llamado al 911.
El femicidio de Melissa Kumber
El hecho ocurrió el 20 de junio de 2019, en una casa ubicada en Quilmes Oeste, sobre la calle San Juan. Durante una presunta discusión de pareja, Melissa Kumber, una Policía de la Ciudad, recibió un balazo en la cabeza, a la altura de la cien; mientras que Mauricio Nicolás Sánchez, integrante de la Policía Federal, tuvo un impacto de bala en el hombro. Junto a ellos estaba su pequeño bebé que tenía siete meses.
En aquel momento, el agente de la Federal dio su versión sobre lo ocurrido y dijo que comenzaron a discutir. Durante esa pelea, sostuvo que Melissa le disparó primero y que él le respondió a ese ataque.
Aunque alegó legítima defensa, la fiscal que llevó adelante la investigación, Karina Gallo, ordenó su detención y elevó el caso a juicio acusándolo de “homicidio agravado por el vínculo y por femicidio”, lo que prevé una pena de prisión perpetua en caso de ser encontrado culpable.
Según la investigación, hay varias pruebas que muestran que se trató de un femicidio y no de un enfrentamiento. Entre ellas, el dermotest en el que solo se hallaron rastros de pólvora en la mano derecha del imputado. “Ella no tenía en ninguna de las dos”, afirmó la pericia.
